¿Cuál es el error más común a la hora de pulverizar? ¿Cómo conviene regular las máquinas? ¿Qué dosis son las más efectivas? ¿Cómo disminuir riesgos y proteger la salud humana y la ambiental? Estas y otras problemáticas serán tratadas en el 1er. Seminario Nacional de Tecnologías de Aplicación de Fitosanitarios, organizado por el Instituto de Ingeniería Rural (IIR) del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) Castelar -Buenos Aires-, junto con el Ministerio de Agricultura de la Nación y la Fundación Cideter.

El encuentro, que se realizará del 9 al 11 de agosto en la sede de la fundación de Las Parejas -Santa Fe-, cuenta también con la adhesión de la Federación Argentina de Contratistas de Máquinas Agrícolas (Facma) y pondrá el acento en la mecanización como eje de la eficiencia en las aplicaciones, con el lema "Hacia aplicaciones sustentables efectivas".

"En la actualidad, resulta indispensable la aplicación de herbicidas, insecticidas y herbicidas, así como la necesidad de extremar los cuidados de la salud humana y del ambiente", advirtió Oscar Pozzolo, director del IIR. De acuerdo con él, este seminario será "de gran utilidad" para profundizar sobre las tecnologías de aplicación y la capacitación de los recursos humanos. Además, destacó la necesidad de "formar agentes responsables y eficientes en la aplicación de fitosanitarios".

Por su parte, Ramiro Cid, técnico del IIR, explicó que "el error más común entre los aplicadores es el exceso en las cantidades, a fin de realizar una cobertura total de la zona, aun cuando no es necesario". En ese sentido, Cid explicó que "lo ideal es aplicar sólo donde se encuentren las malezas, con el agroquímico y la dosis adecuados. Es importante tener en cuenta las particularidades de cada lote".

Gerardo Masiá, coordinador de investigación y desarrollo del IIR, fue más allá e indicó: "El éxito de la aplicación depende de la estrategia que utilice el productor. Para esto debe tener en cuenta, antes de la pulverización, las condiciones atmosféricas, el estado del cultivo y el de las plagas".

Los especialistas coinciden en que cada punto del lote debe tener un manejo diferente, con una dosis y producto determinados. Para ello, recomiendan "implementar tecnología que ajuste la dosis y un detector de malezas que identifique las zonas a pulverizar. Así, se mejora la eficiencia en el uso de agroquímicos y se disminuyen los riesgos de ocasionar daños a la salud humana y al ambiente".

En marco del seminario, agregó Pozzolo, se expondrán las nuevas tecnologías disponibles con demostraciones a campo y diversas exposiciones sobre sus aptitudes y características diferenciadoras.