Dentro de las adversidades que afectan a la soja se encuentran las enfermedades y dentro de estas el grupo que aparecen con mayor frecuencia son las denominadas “enfermedades de fin de ciclo”. Su nombre se debe a que los síntomas de mayor importancia aparecen durante el último período de cultivo. Su potencial de daño varía pero pueden afectar entre un diez y un veinticinco por ciento del rendimiento por lo que debemos prestarle mucha atención al manejo para su control, según informaron desde radio Argentina.
¿Cuáles son las enfermedades de fin de ciclo más comunes?
Mancha marrón, Septoria glicene y Mancha púrpura Cercospora kikuchi.
¿Cuáles son las condiciones para el desarrollo de las enfermedades?
Presencia de la enfermedad en las plantas.
Presencia de lluvias durante el período reproductivo.
Variedades susceptibles. Todas las variedades son susceptibles a estas enfermedades.
Presencia de inóculo en el lote. Esta condición está asegurada con cultivos en siembra directa y antecesor soja o soja de segunda.
Potencial de rendimiento. Cuanto más rendimiento se pueda obtener mayor es la pérdida que se puede producir, según informó el Ing. Agr. Santiago Barberis.
Manejo de las enfermedades
Una de las medidas más importantes para disminuir el impacto de las enfermedades de fin de ciclo es sembrar en lotes con antecesor no soja. Para la zona núcleo sojera serían maíz o sorgo. De esta manera se disminuye el inoculo inicial y el potencial de daño de las enfermedades es menor.
Otra es el seguimiento de la evolución de las enfermedades en el cultivo. Se deben revisar los lotes para detectar enfermedades en el mismo. Los síntomas son visibles en todas las etapas del cultivo. En el caso de Septoria progresa desde la parte inferior de la planta hacia la superior por efecto del salpicado de gotas de lluvia en las hojas. Determinar el grado de avance de la enfermedad en altura es un dato importante para la toma de decisión para el uso de la última herramienta de acción en el control de enfermedades que es el uso de fungicidas foliares.
Toma de decisión para aplicación de fungicidas
Como con cualquier insumo que se utiliza es necesario conocer que retorno se obtendrá por el uso del mismo. En el caso de fungicidas debe aplicarse cuando la enfermedad se encuentra en niveles muy bajos. Estos niveles son los umbrales de acción. Son cantidades levemente inferiores a los umbrales de daño que es la cantidad de enfermedad necesaria para generar un daño similar al costo del control de la misma. Por lo tanto para tomar la decisión se deben considerar elementos al momento de la aplicación y elementos del futuro.
Nivel de enfermedad en la planta
La presencia de síntomas de la enfermedad en la planta indican que la variedad es susceptible, que hay inoculo en el lote, que hubo condiciones para que la enfermedad pudiera desarrollarse en la planta, esto sería temperatura y precipitaciones suficientes. Si la enfermedad llegó al umbral de acción las condiciones presentes están cumplidas. Faltarían los elementos que nos indican cómo se comportará la enfermedad en el futuro o que probabilidad hay de que la enfermedad progrese y genere un daño importante.
Estado fenológico Cultivos entre R3 y R5, inicio de formación de vainas hasta formación de granos son los momentos de mayor respuesta a la aplicación de fungicidas.
Condición del cultivo a mayor potencial de rendimiento mayor es la respuesta al uso de fungicidas si las otras variables se mantienen iguales.