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Respuesta de maíz a estrategias de fertilización diferencial

Los rendimientos de los cultivos se definen por su capacidad de captar y de transformar la energía radiante en materia seca (fotosíntesis) reconociendo que las limitaciones en la disponibilidad de agua y nutrientes explican los diferentes niveles de producción alcanzados. La cantidad de agua almacenada en los suelos en el momento de la siembra es el factor de mayor relevancia para definir los rendimientos del maíz en condiciones de producción de secano de la región semiárida pampeana.

Además de las precipitaciones en el barbecho, las decisiones de manejo del sistema productivo, tales como rotaciones y labranzas, tienen un papel central en alcanzar las reservas de agua necesarias para el logro del cultivo.

La eficiencia de conversión o de uso del agua para la producción de maíz varia, entre otros factores, por la disponibilidad en cantidad y oportunidad de nutrientes. En la región semiárida pampeana, tal como se observa en el resto de la región pampeana se describen reducciones en los niveles extractables de nutrientes y de otros indicadores de la capacidad productiva de los suelos. Ante la identificación de provisiones insuficientes de nutrientes, las alternativas o estrategias de manejo de la fertilización son variadas alcanzándose así diferentes resultados sobre los rendimientos del cultivo y en la eficiencia de uso del agua.

Si bien abundan ensayos que muestran la contribución de correcciones de nutrientes sobre la producción del cultivo, son menos frecuentes estudios sobre los efectos de la integración de decisiones de fertilización atendiendo tanto a la condición de fertilidad del sitio así como las expectativas de producción y la combinación de criterios de interpretación y de aplicación de fertilizantes. En este artículo se presentan los resultados de estudios recientes de comparación de algunas de las estrategias disponibles para el manejo de la fertilización de maíz en sitios representativos de la región semiárida pampeana.

El 30 de noviembre del 2018, sobre un cultivo antecesor de soja, se sembró maíz (DK 7210) en siembra directa, con una densidad de 5 plantas m-2 y distanciadas 52 cm entre hileras. Se instalaron 5 tratamientos de fertilización: i) control sin fertilización, ii) frecuente zonal (correcciones promedio según registros de uso de fertilizantes en el noreste de La Pampa), iii) Normal (fertilización balanceada para rendimientos medios de la región), iv) Mejorado (fertilización según diagnóstico ajustado a mayores condiciones de producción) y v) Completo o según demandas de nutrientes no limitantes a la producción. Las dosis de cada elemento aplicado se resumen en la tabla 2. Se empleó superfostato triple (SFT), UAN, tiosulfato de amonio y Zn en formulación líquida como fuentes de P, de N, de S y de Zn respectivamente.

Tabla 1: Tratamientos de fertilización y dosis aplicadas de nutrientes.

 

El ensayo se llevó a cabo en cercanías a la localidad de Eduardo Castex (LP). Sobre un suelo franco-arenoso con limitantes en profundidad (tosca 120cm). Se evaluaron los contenidos de humedad durante el ciclo del cultivo (método gravimétrico en el momento de la siembra, en floración y en madurez fisiológica) y la producción de granos y componentes del rendimiento para la estimación de la eficiencia de uso del agua y su relación con el uso del fósforo aplicado.

 

Resultados

Los rendimientos de maíz variaron entre 4174 y 10364 kg ha-1 mostrando diferentes resultados según las estrategias de fertilización planteada (p<0,05, Figura 2). El incremento de rendimiento sobre control sin fertilizar fue de entre 26 y 60% según tratamientos evaluados y se relacionó (r = 0,74, p<0,05) fundamentalmente por una mayor formación de granos más que por cambios en el peso individual de los granos.

 

Figura 1: Rendimiento de maíz según estrategias de manejo de la fertilización en un sitio representativo de la región semiárida pampeana. Letras diferentes en la fila indican diferencias significativas entre tratamientos (p< 0,05).

 

Figura 2: Número de granos de maíz m2 según estrategias de manejo de la fertilización en un sitio representativo de la región semiárida pampeana. Letras diferentes en la fila indican diferencias significativas entre tratamientos (p< 0,05).

 

Figura 3: Número de granos de maíz m2 según estrategias de manejo de la fertilización en un sitio representativo de la región semiárida pampeana. Letras diferentes en la fila indican diferencias significativas entre tratamientos (p< 0,05).

 

Al aumentar el aporte relativo de los nutrientes se describieron aumentos a razón de incrementos decrecientes en los rendimientos del cultivo independientemente del nutriente considerado resultando en mayor eficiencia en el uso del agua cuando se combinaron las dosis mayores de NPS, además de incluir la aplicación de Zn. En cambio, la eficiencia de uso de los nutrientes varió entre estrategias de fertilización mostrando en todos los casos índices superiores a las relaciones medias históricas insumo:producto (rendimiento en grano por unidad de nutriente aplicado) favorables.

Sin embargo, los aumentos crecientes en la aplicación de fósforo mostraron reducción en la eficiencia de aprovechamiento del nutriente requiriendo intensificar la relación de ajustes en la dosis de corrección con este elemento tal de no interferir en la normal producción del maíz.

 

Tabla 2: Relaciones entre la producción de granos y la aplicación de nutrientes y el uso del agua según tratamientos de fertilización de maíz en un sitio representativo de la región semiárida pampeana.

 

Conclusiones

En la región semiárida pampeana la disponibilidad de nutrientes limita el 60 % de los rendimientos alcanzados por cultivos de maíz de secano. Dependiendo de la estrategia de manejo de la fertilización se alcanzan niveles de mejora de entre el 2 y hasta el 27 % sobre la práctica frecuente de fertilización. Los mayores aportes medidos en mejoras en la eficiencia de uso del agua se observan al implementar planteos de nutrición combinando la fertilización combinada NPS y NPSZn.

Estos resultados validan la importancia de plantear modelos de fertilización de maíz en sistemas extensivos de secano bajo criterios de nutrición balanceada integral y contemplando las condiciones específicas de sitio tal de alcanzar mejoras en la eficiencia de uso del agua disponible desde la siembra en el suelo.

 

Podés ver la nota completa de Horizonte A.

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