La tecnología de la aplicación dirigida de herbicidas mediante sensores que detectan las malezas y aplican solo allí tiene dos grandes bondades: ahorro de productos y un menor impacto ambiental. Pero, al mismo tiempo, la inversión inicial necesaria para adquirir esta tecnología es importante. Su adopción es cada vez más frecuente en el norte de nuestro país e incipiente en otras regiones.
¿Qué es la tecnología de aplicación dirigida?
Son sistemas para equipar pulverizadores terrestres que permiten aplicar herbicidas solamente donde hay malezas y no en el resto del lote. La tecnología disponible hoy en día es para trabajar solamente en barbechos, ya que no identifica las malezas, sino que reconoce la presencia de maleza verde por contraste.
¿ Cómo funcionan las tecnologías disponibles?
Hoy se dispone de dos marcas comerciales en el mercado, WeedSeeker y WEEDit. Ambos son dispositivos importados que detectan por reflectancia, es decir, utilizan índices ópticos midiendo el NDVI o una banda amplificada NIR respectivamente, y en función del color y umbrales de aplicación que uno puede configurar, realizan la apertura y el cierre de la electroválvula para dejar paso al herbicida.
WeedSeeker trabaja con sensores que emiten rojo e infrarrojo, lo que le permite de esta manera calcular qué es lo que está viendo y captando en ese momento. Las plantas en condición normal cuando son irradiadas con rojo devuelven poco rojo y cuando son irradiadas con infrarrojo devuelven mucho infrarrojo, y así las detecta el sistema.
WEEDit tiene sensores que cuentan con una fuente activa de luz roja que brilla continuamente en dirección al suelo, cuando esta luz es aplicada sobre material vegetal vivo, la clorofila en la planta absorbe parte de ella, la convierte y la emite como luz casi infrarrojo. Una diferencia importante es que lee una maleza mientras está viva (sin importar el color que tenga) porque mide el nivel de clorofila.
Agustín Bilbao, socio de la Regional Aapresid de Necochea, fundó Milar Agro Tech SRL junto a tres socios de Necochea y Tres Arroyos, empresa abocada a desarrollar soluciones tecnológicas para el agro. La firma está en una etapa avanzada de desarrollo de "Eco Sniper", un sistema de detección de malezas que utiliza cámaras ópticas, en vez de sensores, que leen verde en tiempo real. Se trata de un producto nacional.
Milar proyecta tener Eco Sniper comercial hacia fines de 2018 para trabajar con aplicaciones selectivas en barbechos, pero al trabajar con cámaras ya están trabajando en las etapas posteriores que es, mediante inteligencia artificial, poder trabajar con aplicaciones selectivas dentro de cultivos, entrenando el sistema para diferenciar el cultivo de las malezas, y en el futuro realizar reconocimiento de malezas.
Luis Robles Terán, asesor CREA que viene hace varios años trabajando en aplicaciones selectivas, señaló la necesidad de ajustar los monitoreos de malezas y la calibración de pulverizadoras para poder aprovechar los beneficios de las selectivas, así como la estrategia de control químico, planteando la necesidad de un uso más inteligente de residuales, y la necesidad de realizar las aplicaciones selectivas con menos del 60% de cobertura de malezas para que valga la pena.
Inés Irastorza, productora de la Regional Aapresid Bahía Blanca, destacó que utilizando selectivas en 2 a 3 barbechos al año han obtenido ahorros del 53 al 85%. Pablo López Anido, productor de Bandera, Santiago del Estero, y miembro de la Chacra Aapresid local, resaltó la importancia de esta tecnología para el control de malezas perennes y que no se debe olvidar que esta tecnología no reemplaza el uso de herbicidas residuales, cultivos de servicio, ni otras herramientas que son grandes aliadas en el manejo de malezas.
Un punto crucial es la necesidad de estimar de forma ajustada la superficie a aplicar y de esta forma poder realizar la carga adecuada en el tanque. Esto puede realizarse con alguno de los equipos realizando una lectura de prueba, o con otras tecnologías como imágenes satelitales, drones u otras herramientas de monitoreo como la app Sacha que mide cobertura verde de malezas. Otra opción diferente es adaptar el pulverizador para que los herbicidas puros se inyecten en la línea de aplicación, evitando la complicación de que sobre caldo en el tanque donde solo llevan agua pura en el central y en los accesorios productos puros.
Qué evaluar antes de comprar la tecnología
Según el informe, antes de comprar la tecnología como primera medida se debe evaluar el costo del dispositivo y la posibilidad de financiamiento para adquirir el mismo. Luego vienen cuestiones asociadas a los lotes y malezas: la cantidad de hectáreas que se trabajan en barbecho, grado de enmalezamiento de los mismos (con altos niveles, por ejemplo 70%, el ahorro es bajísimo), distribución de las malezas (agregadas o buena distribución), costo de los caldos de herbicidas que se suelen aplicar. Y, por último, cuestiones asociadas al pulverizador a equipar: fundamentalmente estabilidad del botalón, y contar con un buen sistema de agitación, posibilidad o no de armar doble línea de aplicación para la aplicación en una pasada de cobertura total (por ej. para herbicidas residuales) y selectiva.
El costo de los dispositivos comerciales se encuentra alrededor de los US$7000 por metro de botalón.
En síntesis, las aplicaciones dirigidas tienen múltiples ventajas y la REM las ve de manera promisoria porque:
- Permite un menor uso de herbicidas, lo que redunda en un menor costo para el productor y un menor impacto ambiental.
- Permite utilizar una mayor diversidad de herbicidas, especialmente aquellos que por su alto costo no se utilizarían en aplicaciones de cobertura total.
- Permite un control de problaciones de malezas en niveles iniciales muy bajos, situaciones que mayormente no llevarían a una aplicación de cobertura total.
Según REM, a la tecnología se la debe considerar integrada a una serie de prácticas de manejo de malezas y no de manera aislada. "Su éxito solo se entiende si se la complementa con un uso correcto de herbicidas residuales, rotación de cultivos, uso de cultivos de servicios, manejo de cultivos competitivos, etc. Como toda tecnología, el uso con el conocimiento adecuado será clave para su éxito", indicó.