A fines de 2015 la Cámara de Diputados aprobó una iniciativa –generada a partir de una propuesta conjunta elaborada por Juan Casañas y Luis Basterra– que contemplaba subsidiar el costo de los fertilizantes para intentar promover la recomposición del balance de nutrientes.
Pero en 2016, a pesar de que el empresario agropecuario Alfredo de Angeli ocupaba la presidencia de la Comisión de Agricultura del Senado, el proyecto no fue tratado y perdió estado parlamentario.
La iniciativa determinaba que los empresarios agrícolas podrían deducir en la liquidación anual del impuesto a las Ganancias el 100% del costo de los fertilizantes en el ejercicio fiscal en el que se comercializase la primera producción a la que fueron aplicados los nutrientes.
El año pasado las autoridades del Ministerio de Agroindustria comenzaron a trabajar para intentar reflotar esa iniciativa, con el propósito tentativo de que la misma pudiese ser implementada por medio de una resolución. Pero chocaron con la máquina burocrática del Estado nacional.
Este año se presenta la oportunidad de reflotar la iniciativa en el Congreso de la mano del presidente de la Comisión de Agricultura de Diputados, el empresario agropecuario Atilio Benedetti (UCR-Entre Ríos) y nuevamente, por tercer mandato consecutivo, Alfredo de Angeli en la comisión equivalente del Senado.
En la campaña 2016/17 se aplicaron 924.000 toneladas de nutrientes en los principales seis cultivos argentinos. Pero la reposición de fósforo y nitrógeno apenas cubrió el 52% y 40% de la extracción respectivamente. Así lo indica el último análisis del balance de nutrientes realizado este año por el Relevamiento de Tecnología Agrícola Aplicada (ReTAA) de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.