Abrir una aplicación desde la pantalla del celular o la tablet, ingresar los datos requeridos por el sistema, esperar la validación y comenzar a aplicar los fitosanitarios.
Así de ágil y sencillo será, a partir del próximo año, la realización de la Receta Fitosanitaria Online (RFO), indispensable para poder realizar pulverizaciones bajo los requerimientos de la Ley 9.614, que regula la utilización de productos químicos o biológicos de uso agropecuario.
El dato fue revelado a Agrovoz por el director de Fiscalización y Control del Ministerio de Agricultura, Martín Gutiérrez: "Estamos en el proceso de diseño de una app que agilice la gestión de la RFO. Queremos que sea cada vez más simple, que se trabaje y valide por el teléfono".
Avance tecnológico
Cabe recordar que, desde el 1° de agosto de este año, el uso de la RFO es obligatoria; es decir, ya no se puede tramitar más a través de papel impreso.
Un smartphone con acceso a Internet ya puede acceder a realizar la receta online, pero el sistema no está diseñado específicamente para esos dispositivos. La idea, ahora, es que la app tenga campos que se completen fácilmente y la habilitación de la RFO llegue de manera inmediata.
Por eso, se incluirán una serie de variables predeterminadas, como el listado de aplicadores inscriptos en Agricultura o los productos registrados en el Senasa, de manera que si algún ítem no es llenado con información correcta, la RFO no se valide.
También se prevé que automáticamente la app establezca, vía Google Earth, la posición del lote en que se va a realizar la aplicación.
Herramienta de BPA
El uso de la receta online, por ahora, es exclusiva de Córdoba. Pero su éxito y su importancia para mejorar la fiscalización del uso de agroquímicos, ha despertado el interés de otras provincias, como Corrientes o Santa Fe, que están pensando en "copiar" la experiencia y llevarla a sus territorios.
Según Gutiérrez, la RFO significó un "salto cuantitativo" en la cantidad de recetas que se validan periódicamente. Durante los dos años que estuvo disponible, antes de ser obligatoria, se hicieron 10 mil recetas; desde que comenzó a ser la única opción posible en agosto, ya se validaron 15 mil.
Para el director de Fiscalización, agilizar la gestión de la receta y sistematizarla facilitará las tareas de control y servirá como herramienta para la aplicación del fondo de promoción de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA).
"El uso de la receta va a ser uno de los indicadores que se va a tener en cuenta. Y permitirá, por ejemplo, certificar si hubo o no rotación, porque entre los datos que pide se incluye cuál va a ser el cultivo que recibirá la aplicación. A partir de eso, también nos ayudará con las estimaciones de siembra y producción de granos. Es una fuente inagotable de información para la gestión".
AgroVoz