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Manejo del complejo de plagas de soja: MIP versus Control Preventivo

En la República Argentina, desde fines de la década del setenta se determinaron los UD de los siguientes complejos de plagas: orugas defoliadoras, barrenador del brote y chinches (Vicentini y Jimenez, 1977; Bimboni, 1978; Massaro et al., 1981; Iannone et al., 1987). Posteriormente, fueron convalidados y/o ajustados para diferentes épocas de siembra, tipos de cultivares y espaciamientos entre líneas (Gamundi et al., 2003 a; Gamundi et al., 2004; Perotti y Gamundi, 2006; Perotti, 2010; Perotti y Gamundi, 2010).

Recientemente, apuntando a un mayor nivel de integración del MIP, se evaluó el daño conjunto y/o secuenciado de estas plagas, dando lugar al concepto de umbrales multi especies/combinados. Gamundi et al. (2010) evaluaron el daño conjunto y secuenciado de tres plagas: defoliadoras, chinches y Cercospora sojina. Estos autores, manejando las adversidades de acuerdo al UD, no encontraron diferencias de rendimientos por la acción de cada adversidad en forma individual, ni por la acción conjunta de dos o tres de las plagas mencionadas. Perotti et al., 2011, demostraron que la acción en forma individual de Anticarsia gemmatalis, Caliothrips phaseoli y C. sojina en R5, manejada por UD, no afectaron los rendimientos. Cuando actuaron en forma combinada y simultánea, mostraron un efecto de tipo sinérgico con mermas de rendimientos de 780, 744 y 386 kg/ha por el efecto de tres, o de dos de estas plagas: trips más defoliadoras o trips más C. sojina, respectivamente.

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