Este martes los diputados de la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara baja aprobaron un proyecto de ley del legislador Luis Basterra, presidente de la Comisión, que permite desgravar del impuesto a las ganancias la totalidad del costo de los fertilizantes de uso agrícola.
La propuesta venía siendo trabajada desde hace más de un año en la Comisión y fue observada por algunos legisladores a fines del año pasado. Se mantuvo en estudio hasta ayer cuando se puso a consideración de los diputados de todos los bloques que firmaron satisfechos el despacho de comisión.
El proyecto establece que los productores “podrán deducir como gasto adicional en la liquidación anual del impuesto a las ganancias, el cien (100) por ciento de los montos pagados por la compra de fertilizantes, en el ejercicio en el que se comercialice la primera producción a la que fueron destinados”.
Entre los requisitos que establece la ley está la de presentar un plan plurianual de siembra -tipo de cultivo a sembrar, cultivo antecesor, la cantidad de hectáreas a sembrar y las rotaciones previstas- y tendrá una duración de 3 a 5 años y fertilización.
También deberá presentarse un Plan de Fertilización Anual, en el que se consignará “el tipo y dosis de fertilizantes a aplicar por hectárea en base a las buenas prácticas agronómicas”. El Ministerio de Agricultura “establecerá los máximos volúmenes de fertilizantes a aplicar por unidad territorial en virtud de las características del cultivo, condiciones del suelo y demás aspectos que se consideren críticos para una buena práctica de aplicación de fertilizantes”, detalla el proyecto.
Desde Ciafa, la Cámara que nuclea a las empresas proveedoras de fertilizantes, remarcaron en diálogo con El Enfiteuta que apenas un 30% de los fertilizantes se aplican en los procesos de siembra y cosecha, el 70% restante se va con el grano.
La ley deberá ser tratada ahora por la comisión de Presupuesto y Hacienda, pero se espera que sea aprobada sin dificultad ya que “el costo fiscal es nulo” señalaban los diputados este martes. “Es una ley que se autoabastece”, precisó el diputado cordobés Jorge Valinotto (FCYS).
Es que las estimaciones indican que con la mayor fertilización el aumento de la producción no solamente hará neutro el potencial costo fiscal, sino que traerá excedentes al fisco por la tributación de más impuestos en materia de retenciones e incluso ganancias.