Marcos Juárez se sumó ayer a las localidades cordobesas que cuentan con legislación propia para el uso de agroquímicos en la zona lindante al ejido urbano, ya que el Concejo Deliberante finalmente aprobó por unanimidad un proyecto que establece una zona de resguardo de 250 metros.
Según explica el diario La Mañana de Cordoba, se exigirá que las empresas dedicadas al acopio de estos productos se trasladen a un sector alejado de la planta residencial.
En lo que fue la última sesión ordinaria del actual cuerpo legislativo municipal en donde se trataron temas de interés para la comunidad salió aprobada la normativa. Aunque en principio la bancada de la UCR iba a votar en contra, finalmente terminó votando de manera favorable la normativa impulsada por el oficialismo de la Unión Vecinal.
La flamante ordenanza se suma y complementa la ley provincial que prevé ciertas condiciones a quienes manipulan estos productos químicos en la actividad agrícola. Una de las principales cuestiones que debieron resolverse en las últimas semanas fue la de determinar la extensión que tendría la zona de resguardo ambiental. La ordenanza final establece que se crea un sector denominado de esa manera “en todo el perímetro de la ciudad, que se clasifica en cuatro niveles de riesgo (bajo, medio, alto y máximo) teniendo en cuenta determinadas condiciones como predominancia de los vientos, cortinas forestales existentes y densidad de los núcleos poblacionales”.
Para los sectores de riesgo bajo se aplicará una zona de resguardo de 150 metros además de una cortina forestal de 10 metros. Para los medios la norma exigirá que el espacio donde no estará permitida la aplicación de agroquímicos tenga una cortina forestal y 120 metros de distancia. Luego se demarcaron sectores de hasta 150 metros, considerados de riesgo alto; mientras que los máximos serán de hasta 250 metros desde la línea urbana. En esta última franja se presume que es alto el riesgo que las aplicaciones alcancen las viviendas por la cercanía con campos, la orientación de los vientos predominantes, y la tendencia al incremento demográfico paulatino.
Al mismo tiempo, la norma local “prohíbe la aplicación terrestre desde la culminación de la zona de resguardo ambiental y hasta un radio de 500 metros, de productos químicos o biológicos de uso agropecuario de las clases toxicológicas la, lb y ll”. Y queda prohibida la aplicación “en un radio de mil quinientos (1.500) metros a partir de la del último núcleo poblacional”, dice el diario mediterráneo.
