El ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentos realizó durante toda la jornada del jueves una jornada de Buenas Prácticas en la Aplicación de Fitosanitarios, para mostrar que en el manejo eficiente y responsable de estos productos está la clave para la preservación de la comunidad y del ambiente.
La organización se llevó a cabo de manera conjunta con la cartera nacional, y otro de los objetivos fue el de articular a los distintos sectores en este debate. La convocatoria reunió a más de 100 asistentes en el aeródromo de Estación Juárez Celman.
El evento contó con la participación del titular de la cartera agropecuaria provincial, Julián María López, representantes del ministerio nacional, del INTA, y del los ministerios productivos santafesino y bonaerense. Además, asistieron intendentes de varias localidades; legisladores provinciales; miembros de las universidades Nacional de Córdoba y Católica; de la Defensoría del Pueblo; del CEPROCOR; y del Ministerio de Salud.
Cabe destacar la participación de la Comisión Asesora de la Ley 9164, integrantes de la Fundación Mani Argentino, y de las siguientes entidades: Colegio de Ingenieros Agrónomos de Córdoba, SENASA, Comunidad Agroalimentaria, CREA, AAPRESID, Comisión de Enlace Córdoba, Bolsa de Cereales, FADA, CASAFE, CIAFA, FEARCA, CEDASAC y la Cámara de Aplicadores Terrestres.
“Con jornadas de este tipo podemos mostrar a quienes son tomadores de decisiones como intendentes y representantes de concejos deliberantes, que cuando se hacen bien las cosas se disminuye o evita el efecto indeseado de la deriva en las aplicaciones de los productos químicos o biológicos de uso agropecuario”, fue el mensaje que expresaron en sus discursos el ministro Julián López y el secretario de Agricultura, Juan Cruz Molina.
Buenas Prácticas a Campo. Las demostraciones comenzaron con una presentación sobre las buenas prácticas agrícolas, que incluyó equipos de aplicación aérea y terrestre, manejo de agroquímicos, la preparación y carga de los mismos y dinámicas que exhibieron el alcance del efecto no deseado.
Los equipos realizaron pasadas que simularon una aplicación de rutina, en forma perpendicular a la dirección del viento. Para determinar los alcances de la deriva, se instalaron estaciones colectoras con tarjetas hidrosensibles en posición horizontal. Así, los asistentes pudieron seguir paso a paso por medio de una demostración y simulación con agua todo el proceso de utilización de los fitosanitarios.